Las numerosas marchas y protestas han caído en oídos sordos mientras el Dominicano va aceptando la cruda realidad sin revelarse antes los imponentes lideres que buscan una solución a un mal que posiblemente crearon ellos.
Yo en lo personal, pienso que se debe re-evaluar los estragos que esto ocasionara para los trabajadores, para las empresas, y para el gobierno cuando el pueblo decida que ya no puede aguantar mas y se levante en anarquía.
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